Hoy he dicho adiós a mi infancia. He decidido deshacerme del último objeto que me hacía sentirme un poco niña aún.
No ha sido fácil pero era necesario.
He tirado a mi pato de goma por el retrete, tarareando la marcha fúnebre al tiempo que tiraba repetidas veces de la cadena.
No estoy segura de haber hecho lo correcto.
Hoy he dicho adiós a mi infancia y hola al fontanero.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
Luego que hay tuberías reventadas por la ciudad, y estamos de obras cada dos por tres, ni que fueran muellines a lo Homer Simpson ^^
ResponderEliminarñaaaaa!!!
Te sigo de cerca muahahah ^^
Muy bueno XD has hecho lo correcto, los patitos de goma dan mal rollo :P
ResponderEliminarUn beso ^^ te enlazo, ok? ;) (te he descubierto por casualidad XD)
por cierto, sí, soy la p... de celia xP
XD
Bienvenida al mundo bloguero!
ResponderEliminarDigo bienvenida, porque creo que no tenías blog hasta ahora. No está mal. Tiras el patito de goma y te creas un blog, interesante....
besos!
Nacho.