jueves, 22 de enero de 2009

Jazz

Jazz, íntimo,cálido, insinuante.
Traza líneas en tu mente, curvas sinuosas
que te invitan a olvidarte de todo lo demás.

El pum chas de la batería late en tu cabeza.

Entre curvas y cerveza pierdes poco a poco
la noción de la realidad.

El contrabajo marca el ritmo pausadamente.
Cuerdas rectas, cuerpo curvo.

Tu visión se nubla un instante por el humo del cigarro.
Has olvidado uqe estabas fumando. Ahora toda la ceniza
aun caliente descansa sobre la barra siempre sucia del bar.

Oyes el repicar de cada nota del piano,
tamborileas con los dedos sobre la barra imaginando
que eres un Scott Joplin cualquiera.

La música cesa y vuelves de golpe a la realidad.
Pagas deprisa, te levantas y huyes del jazz.
Del jazz, de su hipnótica atracción y de sus sensuales curvas

No quieres malgastar más cigarros.

3 comentarios:

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  2. Mola, mola. Me encanta reposar la cabeza en la atracción hipnótica del jazz.

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